Las distorsiones cognitivas según David Burns
David Burns, uno de los principales exponentes de la terapia cognitivo-conductual, identificó las siguientes diez distorsiones cognitivas:
- Abstracción selectiva: centrarse en un detalle negativo de una situación y sacar conclusiones negativas sobre toda la situación.
- Sobregeneralización: sacar una conclusión negativa basada en un solo hecho aislado.
- Pensamiento dicotómico: ver las cosas en términos de todo o nada, blanco o negro, sin matices.
- Filtro mental: concentrarse solo en la información que respalda las propias creencias y valores, ignorando todo lo demás.
- Personalización: culparse a sí mismo por eventos externos o asumir que los demás lo hacen.
- Falacia de control: creer que se tiene el control sobre eventos que son en realidad aleatorios o que no se pueden cambiar.
- Falacia de la justicia: creer que la vida siempre debe ser justa y que cualquier injusticia es intolerable.
- Falacia de la culpa: creer que uno es responsable de los problemas de los demás o de la felicidad de los demás.
- Etiquetado: aplicar etiquetas negativas a uno mismo o a los demás en lugar de reconocer la complejidad de una persona.
- Magnificación y minimización: exagerar la importancia de un evento negativo o minimizar la importancia de un evento positivo.
Identificar y desafiar estas distorsiones cognitivas es una parte importante del trabajo en la terapia cognitivo-conductual para mejorar la salud mental.